Ernesto Nemer había creado una estructura paralela de Comunicación Social al servicio de sus aspiraciones personales
Demasiado enfocado en su precoz autopromoción “como precandidato a la gubernatura” desde la Secretaría más importante del Gabinete estatal, con una estructura de apoyo a medios informativos afines a su proyecto político, a costa de la gobernabilidad en varias zonas importantes de la entidad, Ernesto Nemer Álvarez es sustituido por Luis Felipe Puente como segundo al mando en la administración del Estado de México.
Su relación con varios exmandatarios y su eterna y compulsiva obsesión por ser gobernador de la entidad, lo convirtió en un estorbo para los planes de don Alfredo del Mazo Maza, porque resultaba materialmente imposible contar con su discreto respaldo a las indicaciones del mandatario, debido a que cada uno de sus poderosos padrinos lo impulsaba en direcciones opuestas, o al menos diferentes.
Se especula que el repentino cambio pudiera obedecer a la intención de sustituir con Nemer a Alito, quien ya está con un pie y la mitad del otro fuera del CEN del PRI, el mismo día que los expresidentes priistas se reúnen para pedirle cuentas al campechano.
Otras especulaciones plantean que su renuncia obedece a la intención de dedicarse de lleno a recorrer el estado con pretextos que le permitan eludir el delito de “actos anticipados de campaña”, en cuyo caso cabría esperar cuanto antes las renuncias en cascada de Alejandra del Moral y Delfina Gómez, entre otros personajes que se mencionan y cuyos puestos son incompatibles con el proselitismo abierto.
Ya veremos.