“Enfrentamiento” entre Guardia Nacional, Marina y grupo armado deja once muertos
Un dudoso “enfrentamiento” entre presuntos integrantes del crimen organizado y fuerzas de seguridad, locales y federales, en el sur del Estado de México, dejó un saldo de 11 personas fallecidas y siete detenidos, además de tres elementos con lesiones, informó la Fiscalía general de justicia del Estado de México (FGJEM).
Algunos noticiarios de televisión ponen en duda que se haya tratado de un “enfrentamiento” tanto por la contundencia de los muertos de un solo lado (el de los presuntos delincuentes), que una de las voces de los videos consigna que estaban “atrincherados“, es decir, a la defensiva, como el casi nulo daño en el bando de las fuerzas de seguridad que solo registraron 3 heridos leves.
La matanza de Tlatlaya fue una masacre en la que 22 civiles fueron asesinados en San Pedro Limón, municipio de Tlatlaya, Estado de México, el 30 de junio de 2014, a manos de militares, pero fue presentada originalmente como un “enfrentamiento” e incluso el entonces gobernador, Eruviel Ávila Villegas se la pasó varios días felicitando por televisión a las fuerzas armadas por haber “abatido en buena ley” a los presuntos delincuentes, hasta que reportajes de AP y la revista Esquire pusieron en evidencia, semanas después, que en realidad se había tratado de ejecuciones sumarias perpetradas por los militares.
Como en la actualidad, por las benditas redes sociales, se hace prácticamente imposible encubrir este tipo de atrocidades, algunos medios especulan que la eventualidad de una ejecución sumaria en Texcaltitlán podría haberle costado el puesto al secretario general de Gobierno, Ernesto Nemer, quien, adicionalmente, ya tenía harto al gobernador con su millonaria estructura paralela de Comunicación Social para su promoción personalísima como “candidato a gobernador”, a contrapelo de los planes del mandatario en esa materia.
“El enfrentamiento con la participación de elementos de la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional, además de la policía estatal, se registró poco después de las nueve de la mañana, a unos cinco kilómetros del restaurante “Truchas Don Pedro”, que se considera “un punto de referencia en la zona” dice un comunicado de la Fiscalía mexiquense.
Texcaltitán se ubica, al igual que Sultepec, en la llamada “zona caliente” del Estado de México, donde este año se han registrado al menos otros dos enfrentamientos entre grupos armados y fuerzas de seguridad, explica la nota respectiva de Proceso.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México reportó cinco vehículos asegurados, además de 20 armas largas. En las fotografías, aparecen los cadáveres tendidos en el suelo boca abajo, sin armas a la vista, lo que hace suponer que, al menos, se alteró la escena.