Dicen que Horacio Duarte margina a tribus morenistas mexiquenses y a periodistas críticos

Al arranque de las campañas electorales por la gubernatura del Estado de México, la precandidata de Morena-PT-Partido Verde, Delfina Gómez, alcanza 59% de la intención de voto efectiva; una ventaja de 18 puntos sobre la abanderada de la alianza PAN-PRI-PRD-Nueva Alianza, Alejandra del Moral, que registra 41% de las preferencias, de acuerdo con la más reciente encuesta, en vivienda, elaborada por Enkoll para EL UNIVERSAL.

Delfina Gómez es, además, la precandidata mejor posicionada, con 78% de reconocimiento y 43% de opinión positiva.

En contraste solo 52% de los mexiquenses conocen a Alejandra del Moral, y solo 26% tienen una buena opinión de ella.

Por otra parte, la intención de voto partidista muestra que Morena es la fuerza política que cuenta con el mayor respaldo electoral, con 53% de la preferencia efectiva, seguido por el PRI, con 28%, y en tercer lugar Acción Nacional, con 10%.

51% de los mexiquenses dice que nunca votarían por el Revolucionario Institucional en la próxima elección, mientras que el rechazo a Morena es de 17%, y el del PAN es de 11%.

Ante esta abrumadora preferencia por Morena y su candidata Delfina Gómez por parte del electorado mexiquense -en lo que coinciden prácticamente todas las encuestas-, no extraña en absoluto que la popularidad del mandatario estatal, Alfredo del Mazo, sea más o menos “buena” (raya en el 50%), puesto que, al parecer, la gente valora su proclividad nada disimulada a llevar “buena relación” con el ése sí muy popular mandatario federal.

El día que don Alfredo se decidiera a usar su presunta “popularidad” para apoyar su causa política -en peligro de extinción-, ésta se vendría abajo en forma estrepitosa, pues se trata evidentemente de un arma de doble filo. Quizá por ello le han recomendado mantenerse completamente al margen de la campaña de su candidata Ale del Moral, contra los que piensan que su absurda abstinencia obedece a un gesto -francamente impensable- de “civilidad electoral” y cada vez más analistas consideran que se trata más bien de un acuerdo de rendición de plaza.

Por cierto que el coordinador de campaña de doña Delfina, Horacio Duarte, sigue denunciando fake news, ahora en materia demoscópica, mientras acumula un prestigio de autoritario entre prácticamente todas las tribus del morenismo mexiquense, a las que, dicen, mantiene al margen del acceso a la candidata.

También parece estar desarrollando un preocupante estilo ¿inspirado en Jesús Ramírez o en el priismo delmacista? de tratar a los periodistas que no le rinden pleitesía incondicional, como apestados.