Rechazó pagar los funerales que había prometido a la familia de Vanessa Guillén, asesinada brutalmente

El racismo de Donald Trump quedó expuesto una vez más, esta vez al mostrar un desprecio absoluto por la familia de Vanessa Guillén, la joven soldado de origen mexicano brutalmente asesinada en 2020. Según un informe publicado por The Atlantic, el entonces presidente explotó al enterarse del costo del funeral, gritando: “¡No cuesta 60 mil dólares enterrar a un maldito mexicano!”. Esta declaración refleja no solo su falta de empatía, sino también la mentalidad xenófoba y racista que permeó su administración.

Trump se negó a pagar funeral de la soldado Vanesa Guillén, aunque lo había prometido

Aunque Trump había prometido públicamente ayudar a la familia Guillén con los gastos funerarios, en privado mostró su verdadero rostro, acusando a la familia de intentar “estafarlo” y rechazando cualquier apoyo económico. Este desprecio hacia una familia que sufría una pérdida tan desgarradora es una clara manifestación de su desprecio por la comunidad latina, especialmente contra la mexicana, a la que ha insultado repetidamente durante su carrera política.

La familia Guillén, que nunca recibió la ayuda prometida por Trump, ha sido testigo de una de las traiciones más crudas a la confianza pública. Mientras frente a las cámaras mostraba un apoyo falso y calculado, en privado atacaba con insultos racistas a aquellos que habían perdido a su hija en condiciones trágicas. La actitud de Trump en este caso no es aislada, sino parte de un patrón de comentarios y políticas que marginalizan a los inmigrantes y las minorías.