Sale de la Coordinación de Comunicación Social mexiquense Miguel Ángel Ramos, lastre del eruvielismo
El Tercer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Segundo Circuito con sede en Naucalpan, ordenó la suspensión definitiva como notarios públicos a los 12 fedatarios designados por el exgobernador Eruviel Ávila al final de su mandato, informa Veneranda Mendoza en Proceso.
El abogado constitucionalista Oscar Valdés Ramírez precisó que a partir de la notificación de la medida, los 12 notarios que ya habían entrado en funciones deberán suspender sus actividades en tanto se resuelve este segundo amparo, que esperan ocurra aproximadamente en un mes.
Debido a que en el transcurso de estos días los notarios incómodos realizaron actividades propias de su cuestionado encargo, el Tribunal determinó que los actos serán válidos para no afectar a terceros.
Quizá ya va siendo hora de que el gobernador Del Mazo deje atrás esa caballerosidad política que ha mostrado ante las herencias nefastas de su antecesor, quien por cierto no fue nada caballeroso (imposible pedirle peras al olmo) en su obsesión por controlar la campaña del priista, quien se hizo de la gubernatura a pesar del nutrido fuego amigo, al menos en materia de comunicación, por parte de la gente de Eruviel, muy destacadamente Alejandra Sota y Carlos Aguilar.
Quizá un paso en esa sana dirección lo constituye el despido, ayer mismo que se fraguaron cambios en casi la mitad del gabinete, de Miguel Ángel Ramos, uno de los lastres indeseables que deambulaba como fantasma en la Coordinación de Comunicación Social del gobierno mexiquense. Y todavía quedan algunos.
La salida de Ramos puede presagiar la de su padrino en Radio y TV Mexiquense, Carlos Aguilar, el amiguito íntimo de Eruviel que ofendió y lastimó durante 6 años a los periodistas del Estado de México con sus absurdos caprichitos, su ignorancia ostensible en la materia y sus moditos de déspota propios de algunas primeras damas inseguras y fastidiosas.
Del Mazo nos la debe a los periodistas que tuvimos la mejor intención de hacer un trabajo profesional y digno en el proyecto de la televisora oficial del Estado de México que fundó con gran visión su padre, don Alfredo del Mazo González. Ojalá la pesadilla de Carlitos Aguilar pase a formar pronto -junto con la de Patricia Garza– parte de la historia de una emisora llena de contrastes.
Pero si les apena correr al frágil muchachillo, les aconsejo pedirle a Alex Lora, de El TRI, realizar el encargo, con la sensibilidad y exquisitez del lenguaje que le caracterizan, de solicitarle amablemente a Aguilar tenga a bien abandonar el cargo, para que alguien más maduro, inteligente y formado en televisión, como por ejemplo Juan Carlos Quintero, ocupe con mejores méritos su lugar. ¿No cree usted?
https://youtu.be/uLr2pNbOjkg
