AMLO: INE será reemplazado por INEC. LA VERSIÓN NO OFICIAL. Por Jesús López Segura

Desaparecerían Institutos estatales, pluris, y financiamiento a burocracias partidistas

En su presentación de una Reforma Electoral que se perfila como imposible de aprobar por los opositores, y que hoy mismo será enviada a la Cámara de Diputados, el Presidente López Obrador, auxiliado por el secretario de Gobernación, por el mexiquense Horacio Duarte (a quien brinda elogios y reconocimiento por su larga trayectoria de lucha y reflexión en la materia) y por Pablo Gómez, plantea en primera instancia la desaparción del INE y la instauración de un nuevo Instituto Nacional de Elecciones y Consultas (INEC), que estará dirigido por 7 en lugar de 11 consejeros, pero elegidos por el voto ciudadano a propuesta de los 3 Poderes de la Unión.

Se menciona muy optimistamente que la elección de los nuevos consejeros se realice el 1 de agosto.

Este nuevo Instituto nacional implica la desaparción de los institutos electorales locales “para evitar la duplicidad de gastos”. Todas las medidas anunciadas supondrán un ahorro de más de 24 mil millones de pesos anuales.

También se plantea la desaparición de las diputaciones plurinominales, de modo que solo quedarían los 300 diputados elegidos por mayoría en el Congreso de la Unión.

Cuestionado el mandatario sobre si este punto no altera el equilibrio de representación que las pluris garantizan, don Andrés (que debió haber delegado la respuesta a Horacio Duarte) responde con vaguedades sobre la importancia del voto ciudadano para la democracia, y los vicios de los jerarcas partidistas que proponían como plurinominales a sus secretarios o amigos, dejando ver que no tiene ni la más lejana idea de lo que para el equilibrio auténticamente democrático representan las pluris.

Se eliminará el financiamiento para los gastos corrientes de los partidos políticos y solo se destinará dinero público para las campañas, exclusivamente en los tiempos de elecciones.

Cuestionado sobre la inminente oposición de los legisladores a aprobar semejante reforma porque afecta directamente sus intereses, don Andrés plantea que “los legisladores de oposición van a tener que revisar sus procedimientos. Si siguen pensando que ésa debe ser su posición, rechazar todo, pues la gente -que ya está muy despierta, muy atenta- va a sospechar, aunque ahora no reciban dinero como cuando aprobaron la reforma energética del peñismo. Deben abandonar el interés partidista y tomar en cuenta al pueblo”.

“Aunque no se apruebe, es nuestra responsabilidad porque venimos de un proceso democrático y ¡cómo vamos a pasar sin hacer nada! ¿Cuántos asesinados en la lucha por la democracia; en los fraudes electorales? ¿Qué no vamos a hacer nada para que nunca más regresemos a esos tiempos?”