Presupuesto por más de 377 mil millones de pesos aprueba la Legislatura, ¡sin nuevos endeudamientos!

En un contexto de incremento de deuda pública, la entidad mexiquense ha visto un alza significativa en sus compromisos financieros durante la última década. Según datos de la Secretaría de Hacienda y un análisis del Centro de Finanzas Públicas, la deuda estatal pasó de 39 mil 507 millones de pesos en 2014 a 66 mil 919 millones en 2023, lo que representa un aumento del 69%. Esta tendencia alcista se mantuvo durante el periodo, principalmente a través de financiamientos contratados por el gobierno estatal, destaca en su información para El Sol de Toluca la reportera Violeta Huerta.

Aunque este año no se adquirirán nuevos financiamientos, el presupuesto estatal contempla destinar más de 10 mil millones de pesos al pago de intereses y amortización de la deuda heredada. De esta cifra, seis mil 503 millones 729 mil pesos corresponden al costo financiero de la deuda, mientras que dos mil 671 millones 236 mil pesos se destinan a previsiones para el pago de adeudos de ejercicios fiscales anteriores, y mil 151 millones 572 mil pesos están dirigidos a amortizaciones.

En cuanto al aumento progresivo de la deuda, el saldo pasó de 39 mil 507 millones de pesos en 2014 a 66 mil 919 millones en 2023. A pesar de ello, la administración estatal ha enfatizado que la deuda pública se mantiene en niveles sostenibles, y se ha comprometido a no aumentarla. Además, los financiamientos están contratados en promedio a plazos de 15.1 años, superando el promedio subnacional de 12.5 años.

En contraste, la Legislatura del Estado de México aprobó por unanimidad un presupuesto para 2024 que asciende a 377 mil 935 millones 43 mil pesos, sin la contratación de nueva deuda pública. Esta medida marca un hito importante, ya que es la primera vez en los últimos diez años que no se recurre a financiamientos para el presupuesto estatal.

El paquete fiscal aprobado contempla incrementos para entes autónomos, descuentos y subsidios a contribuyentes cumplidos en impuestos y derechos municipales y estatales. Además, se asignan recursos considerables para diferentes áreas y órganos estatales, incluyendo el poder ejecutivo, legislativo, judicial, así como órganos autónomos y municipios.

En resumen, el Estado de México enfrenta el desafío de gestionar su deuda creciente mientras busca mantener un equilibrio financiero para asegurar el bienestar de sus habitantes y el desarrollo sostenible de la entidad. La aprobación de un presupuesto sin nueva deuda marca un paso importante hacia la estabilidad económica y la responsabilidad fiscal.