sábado, octubre 11

Las ocurrencias diputadiles y la ignorancia morenista. AL GRANO. Por Jesús López Segura

0
49

Quien se atreva a alterar la letra del Himno podría sufrir cinco años de cárcel: diputado de Morena

En un país donde feminicidas y narcotraficantes gozan de impunidad, Morena propone cárcel para quienes desafinen al cantar el Himno Nacional, mientras en el Estado de México ya fantasean con castigos de siete años por tirar basura, o por agredir a un maestro.

Cantante Deyra Barrera se equivoca al entonar el Himno Nacional

Lo que late detrás de iniciativas como la del morenista Juan Guillermo Rendón —quien pretende encarcelar hasta por cinco años a quienes se atrevan a “alterar” el Himno Nacional— no es un genuino celo patriótico, sino una peligrosa mezcla de revanchismo social, paternalismo autoritario y hasta un racismo al revés. Se trata de legislar no para proteger a la ciudadanía del verdadero terror que la consume —el crimen organizado, los feminicidios, la impunidad rampante—, sino para castigarla con ocurrencias paridas en la ducha o en noches de insomnio que rozan la esquizofrenia.

Diputado Israel Espíndola sugiere castigar hasta con 11 años de prisión a quien tire basura en la calle

Diputado Israel Espíndola sugiere castigar hasta con 11 años de prisión a quien tire basura en la calle

Ya no basta con la absurda propuesta en el Estado de México de encarcelar hasta once años a quienes tiren basura o molesten a un maestro: ahora resulta que cantar una estrofa alterada del Himno puede considerarse delito grave, con penas más severas que las que enfrentan, en la práctica, feminicidas o narcotraficantes. La lógica invertida es reveladora: mientras los criminales de verdad gozan de un manto de impunidad, los ciudadanos comunes se convierten en el blanco perfecto de un Estado que se venga de ellos, como si el problema del país fuera el mal canto en un estadio o la rebeldía juvenil frente a malos maestros.

Es una justicia simbólica que raya en la venganza de clase: castigar al ciudadano de a pie con penas desproporcionadas, mientras los intocables —políticos corruptos, delincuentes violentos, mafias enquistadas— se pasean inmunes. Una especie de revancha disfrazada de “orgullo nacional” que en realidad expone la incapacidad de quienes deberían estar legislando para salvar vidas y garantizar justicia real.

Los alegres compadres

¿Cuánto tiempo falta para que diputadetes como Ricardo Monreal propongan cadena perpetua para quien se atreva a considerar públicamente que Adán Augusto López es un lastre para el morenismo?

En el fondo, estas propuestas reflejan un desprecio hacia la sociedad, como si el pueblo —al que se le profesa un amor meramente discursivo en forma permanente— necesitara ser disciplinado a garrotazos legales. Y así, entre símbolos patrios, basura callejera y la tiranía “intelectual” en el aula, se normaliza un autoritarismo con tintes de revanchismo social, donde lo ridículo se vuelve trágico: se legisla para castigar la forma, nunca el fondo.

Baches en Toluca

Ciudadanos de Toluca se quejan de los innumerables baches en la ciudad

En Toluca, por ejemplo, la gente ya empieza a manifestarse públicamente contra la indolencia de su alcalde, Ricardo Moreno (de apellido y de filiación partidista —¿ya regresó, por cierto, de su misterioso viaje a Estados Unidos?—), incapaz de reparar los baches que vuelven intransitables sus calles, al tiempo que aplica operativos de alcoholímetro que sus asesores diseñaron quizá bajo los efectos del propio alcohol, pues sumado al desastroso caos por las inundaciones, deriva en filas kilométricas de revisión irracional y despótica.

Es lo que sucede cuando se disfraza como “amor al pueblo” el odio nada contenido por el obradorismo contra la clase media, aderezado con un incomprensible nalgaprontismo frente a los megamillonarios de siempre, con la mira puesta en el ascenso en la pirámide social y económica. El típico desprecio de los nuevos ricos, de los nuevos capataces, hacia sus antiguos correligionarios de clase.

 

¿CINCO AÑOS DE CÁRCEL?

 

Comments are closed.