viernes, julio 26

Nuevo espaldarazo de AMLO a Alfredo del Mazo. Por Jesús López Segura. LA VERSIÓN NO OFICIAL

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Con Higinio Martínez y Horacio Duarte, AMLO va por el control del INE: Salvador García Soto

En el Estado de México causan mucho desconcierto los continuos espaldarazos que el Presidente López Obrador viene a darle al gobernador mexiquense Alfredo del Mazo.

Este fin de semana, por ejemplo, la prensa local publica que López Obrador pidió que le aplaudieran al gobernador por su decisión de sumar la entidad al proyecto del INSABI

“Quiero agradecer mucho, miren yo no soy palero, no soy barbero, no soy lambiscón, siempre digo lo que siento; ya sé que a algunos no les va a gustar, pero mi pecho no es bodega: ¡Se ha portado al cien el gobernador del Estado de México!,” habría dicho textualmente quien ha acusado al tercero de la dinastía Del Mazo de haberse robado la elección con el apoyo de su primo, el ex presidente Peña.

Son varias las hipótesis para tratar de entender el comportamiento tan amistoso de López Obrador frente a un gobernador emblemático de la mafia del poder que endeuda a su estado hasta la ignominia, ocupa el lugar de peor evaluado por la población -según Mitofsky-, usa -según reconoce su propio vocero en un reportaje de SinEmbargo– su programa favorito de la “Tarjeta Rosa” para “crear un ejército de aduladoras de su gobierno”, y autoriza un tarifazo camionero que tiene a la entidad al borde de una revuelta social.

1.- La primera hipótesis -que obviamente no gusta a los partidarios de la 4T- pero como el pecho de la ciencia social tampoco es bodega, señala que existe, como se especula a sotto voce, un “pacto de impunidad” con Peña Nieto, el cual se hace extensivo a su primo y heredero del último resquicio de poder del Grupo Atlacomulco. Según esta hipótesis, el comportamiento lastimosamente sumiso del líder morenista de la Cámara local de Diputados, Maurilio Hernández, obedecería a una interpretación lacayuna de ese presunto “pacto”.

2.- Otra hipótesis es la que señala que, hábil como es, López Obrador trata de mantener contento a toda costa a Alfredo del Mazo -aunque en el fondo ello le provoque náuseas- porque tiene un interés muy especial en que la construcción del aeropuerto de Santa Lucía y la habilitación del de Toluca no encuentren obstáculos, pues la jugada de cancelar el proyecto Texcoco fue peligrosamente arriesgada y hasta temeraria.

El senador Higinio Martínez, cabeza del grupo hegemónico de Morena en la entidad, se opuso -en abierta rebeldía- a la cancelación del proyecto Texcoco y desafió al Presidente López Obrador al rodearse en su informe como senador, de personajes tan repudiados por el morenismo mexiquense como Eruviel Ávila y Josefina Vázquez Mota, entre otros, nada menos que en el fastuoso escenario del Salón Rojo del Club Toluca, favorito de los priistas.

A pesar de ello y de haberse declarado políticamente muerto después de ese desafío, parece haber resucitado y acompañó a López Obrador en su lisonjera cita con Del Mazo de este fin de semana. Además, ha sido señalado por el columnista de El Universal Salvador García Soto (Serpientes y Escaleras), como el bastión del obradorismo para apoderarse del INE.

3.- La tercera hipótesis apunta a que López Obrador está tan harto de las grillas internas de Morena -especialmente las que se dan en el Edomex-, que planea renunciar (idea sustentada por el propio García Soto en otra de sus interesantes columnas) por lo que le importa un bledo que los miembros del GAP malinterpreten su estrategia y se pongan de tapete con Del Mazo.

Según esta hipótesis AMLO salvaría su mayoría en la elección intermedia apoyándose en los nuevos partidos políticos que se perfilan, entre los cuales figuran uno que encabeza su ex chofer y otro la maestra Elba Esther Gordillo -sacada por indicación presidencial de la cárcel-. Así se explicaría que haya celebrado “inexplicablemente” la aprobación en el INE del partido borolista Cuba Libre, o México Libre, junto con otros institutos políticos para la elección intermedia del año próximo.

Desde luego, como siempre ocurre en las hipótesis de la Ciencia Social, la realidad será la resultante de la interacción dinámica de todas ellas y otras más.

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