Rusia realizará maniobras simuladas con armas nucleares tácticas
Es la primera vez que se anuncian este tipo de actividades. Preocupa el contexto de tensiones con Occidente
El Ministerio de Defensa de Rusia anunció la realización de maniobras simuladas que implican el empleo de armas nucleares tácticas en el campo de batalla, marcando la primera vez que el país hace pública esta actividad. Estos ejercicios se llevan a cabo en un contexto de crecientes tensiones con Occidente, provocadas, según el Ministerio de Defensa ruso, por declaraciones y amenazas de funcionarios occidentales.
Las armas nucleares tácticas, de menor potencia que las ojivas utilizadas en misiles balísticos intercontinentales, serán el foco de estos simulacros, que tienen lugar en medio de un clima de escalada en las tensiones entre Rusia y sus vecinos occidentales.
El anuncio de estos ejercicios parece ser una respuesta directa a comentarios recientes de líderes occidentales sobre la situación en Ucrania. Rusia ha expresado su preocupación por el posible aumento de la participación occidental en el conflicto ucraniano, incluyendo la posibilidad de despliegue de tropas y el suministro de armas avanzadas a Kiev.
El Kremlin ha calificado estas acciones como peligrosas y ha advertido sobre las consecuencias de una mayor escalada en la región. Funcionarios rusos han reiterado que consideran estas medidas como provocaciones que podrían llevar a una catástrofe global.
Estos simulacros se enmarcan en un contexto más amplio de conflicto en la región, donde Rusia ha sido acusada de llevar a cabo una campaña de actividades híbridas que representan una amenaza para la seguridad de los países de la OTAN.
Mientras tanto, en la frontera entre Rusia y Ucrania, continúan los incidentes, con reportes de ataques de drones ucranianos en territorio ruso y bombardeos rusos sobre infraestructura eléctrica en regiones ucranianas. Este conflicto de desgaste ha provocado numerosas víctimas y ha generado preocupación internacional por una escalada aún mayor.
En resumen, los simulacros de maniobras nucleares tácticas anunciados por Rusia representan un nuevo capítulo en la escalada de tensiones en la región, con consecuencias potencialmente graves para la estabilidad y la seguridad internacional.
