Histórica incautación de cocaína en Canadá: golpe al CJNG y al crimen organizado

Tras una investigación de cinco meses, la Policía de Toronto incautó 835 kilogramos de la droga
Tras cinco meses de investigación, la Policía de Toronto incautó 835 kilogramos de cocaína, el mayor decomiso en su historia, valorado en 83 millones de dólares canadienses. Según las autoridades, la droga tiene presuntos vínculos con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y fue introducida desde México, cruzando la frontera de Estados Unidos hacia Canadá.
La operación, denominada Proyecto Castillo, contó con la colaboración de diversas agencias de seguridad, incluyendo la Policía Regional de York, la Real Policía Montada de Canadá (RCMP), y la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (CBSA). Parte de la droga fue descubierta en un camión interceptado en la frontera el 15 de octubre, mientras el resto se halló en escondites tras órdenes judiciales.
Impacto en el crimen organizado y el mercado de drogas
La incautación, considerada un golpe significativo al crimen organizado, provocó un aumento del 20% en el precio de la cocaína en las calles de Canadá, reflejando el impacto en las redes de distribución. Además, las autoridades resaltaron que este decomiso no solo interrumpe la cadena de suministro, sino que también afecta las finanzas de las organizaciones criminales, debilitando su capacidad operativa.
Implicaciones sociales y legales
Seis personas fueron detenidas, incluyendo cuatro canadienses y dos mexicanos con estatus legal de visitantes. También se emitieron órdenes de arresto contra otros sospechosos en Canadá y México, con posibles procedimientos de extradición en curso.
Las autoridades subrayaron el vínculo entre el tráfico de drogas, la violencia armada y la crisis de salud pública. La retirada de esta cantidad de cocaína representa un paso crucial para mitigar los efectos de la adicción, la violencia y la inseguridad en las comunidades canadienses.
Esta operación destaca la urgencia de reforzar la cooperación internacional para enfrentar al crimen organizado transnacional y denota un esfuerzo muy especial del gobierno canadiense por enfrentar los retos y amenazas de Donald Trump.