¡Los que violamos mil veces la soberanía estadounidense con drogas e indocumentados somos nosotros!

¡Ay doña Claudia, qué mal la están asesorando! Mientras más se obsesiona en defender la soberanía, –incluso ahora añadiendo parrafitos constitucionales a modo, con un indeseable tufo xenófobo–, más queda en evidencia la intención de los machones que la rodean -y le regatean el poder que usted y solo usted debería ejercer a plenitud-, de proteger a criminales de la probable acción del Team América.

Ciertamente no podemos ser ingenuos y creer en la buena voluntad del Presidente Ku Klux Klan cuando nos ofrece “ayuda” para combatir a los terroristas que nos asesinan, extorsionan y torturan, a diario, en sus cada día más numerosos enclaves en el territorio nacional. Pero tampoco podemos hacernos los exquisitos con nuestros sacrosantos valores nacionalistas y soberanos cuando somos en realidad nosotros los que pisoteamos a diario la soberanía estadunidense con toneladas de drogas mortales y millones de indocumentados.

Quisiera creer, de veras doña Claudia, que García Harfuch fue a Washington a negociar las cabezas que, en breve, se le van a entregar a Trump, para hacerlo desistir de los arancelazos anunciados para marzo y abril. Que, como dice el analista de Código Magenta, le juega usted al Juan Escutia solo para calmar a los capos del narco y de la política que la tienen amenazada con declarar que “las órdenes siempre vinieron desde arriba”.

Sería usted para mí la mujer maravilla que dice el mitómano profesional, Donald Trump (al día siguiente por cierto de declarar que México está gobernado por el narco) si en serio fingiera usted demencia en la retórica, al tiempo que trabaja con su secretario consentido para erradicar los abrazos y emprender los balazos contra los delincuentes que tienen a México de rodillas.

¿Le informaron que 20 de las 50 ciudades más violentas del mundo son mexicanas? ¿Que 7 de las 10 más peligrosas de todo el planeta son nuestras?

¿Cómo hablar de soberanía e independencia cuando los criminales se han apoderado de medio país?
¿Quién carajos la está mal aconsejando?
¿Cree usted en la sinceridad de Donald cuando la califica como una mujer maravillosa?
¿La tienen secuestrada, amenazada de muerte, doña Claudia?
¡Háblenos, pida auxilio!
¿El Club de Tobi morenista no la deja respirar?

Los arlequines Ricardo Monreal y Adán Augusto López

¡El pueblo de México dará la cara por usted siempre que nos hable con la verdad y se deje de andar quedando bien con melón y con sandía!

No puede usted, con todo respeto, doña Claudia, seguir usando nuestra bandera y nuestra Constitución como trapeadores para limpiar el desastre que le heredaron.

¡Fájese las enaguas mi estimada Presidenta!, cambie usted al Fiscal General de la Republica y emprenda la limpieza del país antes de que nos destruyan económicamente, pero no solo porque se lo exija el Team América en un plazo perentorio, sino porque es un anhelo de todos los mexicanos de bien. No se puede continuar con el peligroso jueguito de quedar bien con los machones que la rodean, mientras la Patria se desangra.