El fraccionamiento de lujo presenta, además, graves irregularidades en sus permisos de construcción

El desarrollo inmobiliario “Reserva Santa Fe“, en Lerma, Estado de México, ha provocado un despojo de tierras que antes eran un santuario para las comunidades mazahuas y un hogar para una amplia diversidad ecológica, reporta la revista Proceso.

A pesar de su promesa de “vida en armonía con la naturaleza,” el proyecto ha sido criticado por los comuneros de la zona, quienes ven en el escarabajo, emblema del proyecto, un símbolo del despojo que están experimentando. La construcción de este fraccionamiento de lujo, ubicado en un área natural protegida, ha generado conflictos con las comunidades locales y ha dejado en evidencia las disparidades económicas entre los residentes locales y los futuros habitantes de Reserva Santa Fe, cuyas propiedades alcanzan hasta 30 millones de pesos.

Además, el proyecto se ha desarrollado a pesar de irregularidades en los permisos, lo que ha llevado a un prolongado conflicto de tierras que se remonta a 1947. La construcción de Reserva Santa Fe continúa a pesar de la oposición de las comunidades circundantes y deja a los locales luchando por sus derechos y tradiciones.

Según consta en la FME N-2022074523, el objeto social principal de Reserva Santa Fe es: “La compra, venta y comercialización de todo tipo de bienes inmuebles incluyendo, de manera enunciativa mas no limitativa, desarrollos inmobiliarios, unidades habitacionales, departamentos, lotes y townhouses, así como la planeación y comercialización de fraccionamientos urbanos y campestres”.