A pesar de los altos índices de inseguridad la inversión extranjera crece

El desarrollo empresarial en México está siendo severamente obstaculizado por la violencia y el crimen organizado. Empresas de todos tamaños enfrentan extorsiones, robos y asesinatos, lo cual ralentiza la economía y afecta gravemente a miles de familias, plantea el diario El País en un amplio reportaje. El crimen, anteriormente centrado en el narcotráfico, ahora abarca una diversidad de delitos cometidos por bandas locales, que atacan desde pequeños negocios hasta grandes corporaciones.

Extorsión en México queda impune

Recientemente, líderes empresariales como Minerva Pérez Castro y Julio César Almanza Armas fueron asesinados tras denunciar la inseguridad, lo que evidencia la gravedad de la situación. Empresas grandes, como Femsa, han tomado medidas extremas, como cerrar temporalmente tiendas en zonas peligrosas, mientras que las pequeñas empresas luchan por sobrevivir. La extorsión afecta significativamente la cadena de suministro, aumentando los costos y riesgos operativos.

A pesar de la inseguridad, la inversión extranjera sigue llegando, impulsada por la proximidad a Estados Unidos y el tratado comercial T-MEC. Sin embargo, los costos de seguridad son elevados, con un 10% del presupuesto empresarial destinado a protegerse del crimen. La violencia impacta también al ciudadano común, que enfrenta pérdida de empleos y servicios, además de ser víctima directa o indirecta de la delincuencia.

El 97,4% de estas extorsiones, según el Inegi, quedan en la impunidad. Los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) cuentan 31 víctimas al día de delito de extorsión entre enero y junio de 2024, lo que significa más de una extorsión por hora.

Extorsión en México aumenta

La agricultura, un sector clave, también sufre extorsiones, lo que contribuye al aumento de precios en productos básicos. La impunidad es generalizada, con un 97.4% de los delitos de extorsión sin ser denunciados, y la respuesta gubernamental es insuficiente. La situación es alarmante, ya que las micro, pequeñas y medianas empresas, que generan el 72% del empleo y el 52% del PIB, son cruciales para el futuro económico del país.

México necesita una estrategia de seguridad efectiva para garantizar el crecimiento empresarial y económico, y superar los desafíos impuestos por la violencia y la criminalidad.