¿Fuego amigo dentro del GAP? LA VERSIÓN NO OFICIAL. Por Jesús López Segura
Milenio, ¿financiado por Maurilio?, ataca a Delfina… Higinio finge “defenderla” y AMLO le da un nuevo espaldarazo
Resulta muy sintomático que el medio nacional donde por obvio “convenio de publicidad” con el Congreso mexiquense, se difunden frecuentemente declaraciones en video, totalmente intrascendentes desde el punto de vista noticioso, de Maurilio Hernández, se saquen repentinamente de la manga una nota del 2017 en la que acusaban a Delfina Gómez (y de pasadita a Horacio Duarte), de haber obligado a los empleados del ayuntamiento de Texcoco, a donarles el 10% de su salario cuando la ahora secretaria de Educación Pública era alcaldesa.
La nota en cuestión (anexamos la versión de Azucena Uresti) indica que “voluntariamente” trabajadores de Texcoco donaban 10% de su salario directamente al Grupo Acción Política, desde el cual esos personajes, junto con el senador Higinio Martínez (y su hermano el tesorero del ayuntamiento), construyeron lo que posteriormente sería la hegemonía política del morenismo mexiquense, hasta la fecha.
Y más sintomático aún resulta que don Higinio salga el mismo día a criticar esa información (aunque en realidad lo que hace es contribuir a difundirla), en términos por demás pedestres, como el hecho de que, en ese tiempo, Morena no existía “y no tiene por qué el INE, entonces, sancionar al partido con una multa de más de 4 millones de pesos”, cuando el dinero iba a parar a las arcas no del partido, sino del GAP.
“Defiende” entonces Higinio a Morena, no a Delfina, como ya se le ha hecho costumbre al “líder moral” del grupo hegemónico de ese partido en la entidad. Recordamos el hecho reciente de que, ante el linchamiento mediático febrilmente misógino contra la alcaldesa de Metepec, Gaby Gamboa, el senador que la apadrinó no tuvo una sola palabra de público aliento para ella.
La maestra Delfina también fue acusada de tener en la nómina del ayuntamiento de Texcoco donde fue impuesta por el cacique de esa localidad, a parientes y amigos del Grupo compacto de Acción Política, es decir, de Horacio Duarte y del propio Dr. Higinio Martínez.
Para cerrar el cuadro de la adelantadísima sucesión en el gobierno del Estado de México, -“laboratorio de la sucesión presidencial” ya también más que desatada- y sin que viniera al caso de la disertación que el Presidente hacía sobre alguna pregunta de los reporteros en La Mañanera, repentinamente soltó el espaldarazo:
“La maestra Delfina es una persona íntegra, honesta. Nunca había sido una mujer la secretaria de Educación Pública. Como están muy enojados ahí me doy cuenta de que estamos bien. De que avanza la transformación. Si me estuvieran elogiando me daría cuenta de que algo no anda bien y no avanzamos”, dijo el Presidente esta mañana.
Independientemente de que no basta la santificación declarativa del mandatario para “purificar” a nadie, ¿se necesitan más pruebas de que don Andrés se alejó del Dr. Higinio Martínez por su traición en el asunto del aeropuerto de Texcoco, tema tan delicado que el Presidente sigue mencionándolo y trayéndolo a cuento hasta ahora, en su Tercer Informe de Gobierno?
¿Alguien, en su sano juicio, podría pensar que si Higinio tuviera realmente alguna probabilidad de ser postulado por don Andrés, andaría desbocándose como galgo atrabancado?
Claro que no. Esperaría pacientemente los tiempos, como hacen los otros precandidatos, calladitos, tratando de hacer bien su trabajo (en el caso de Delfina eso se ve muy cuesta arriba), aguardando la decisión del jefe y no tratando de ganarle la partida.
Los que andan acompañando al Dr. Martínez en sus precoces autodestapes y giras ¿ilegales? de precampaña, deberían tomar eso en consideración. ¿No cree usted?
