Finalmente el Congreso mexiquense despenaliza el aborto, tras 15 años de debate
Panistas y algunos y algunas priistas votaron en contra, emitiendo sus argumentos
En una decisión histórica, largamente postergada, la Legislatura del Estado de México aprobó la despenalización del aborto hasta las 12 semanas de gestación, posicionándose como la décimo octava entidad en México en adoptar esta medida. La votación, realizada en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, culminó con 65 votos a favor, 7 en contra y 4 abstenciones. Los legisladores de Morena, PT, PVEM, MC y algunos del PRI respaldaron la reforma, mientras que el PAN fue el único partido que rechazó de forma unánime la iniciativa.
El debate marcó el cierre de un rezago legislativo de 15 años, durante los cuales diversas iniciativas para garantizar este derecho habían sido desestimadas. La reforma modifica los artículos 148 y 151 del Código Penal estatal y deroga los artículos 149 y 150, estableciendo que la interrupción voluntaria del embarazo después de las 12 semanas sigue siendo un delito sancionable con penas de prisión y multas, especialmente si ocurre sin el consentimiento de la gestante o con violencia.
Tensiones y movilización social
La discusión polarizó a la sociedad. Frente al Congreso, manifestantes convocados por la Diócesis de Toluca protestaron contra la medida, mientras que colectivos feministas de la Ola Verde celebraron el avance de un derecho largamente exigido. Para garantizar la seguridad, el recinto legislativo fue resguardado con vallas metálicas y presencia policial.
Posturas encontradas en el Congreso
El PAN, representado por el diputado Anuar Azar, argumentó en contra de la despenalización, calificándola como una evasión estatal de implementar políticas públicas para mejorar las condiciones de vida de las mujeres. Azar defendió el derecho a la vida desde la concepción y afirmó que, en casos como la Ciudad de México, la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) no ha resuelto problemáticas como la mortalidad materna o el aborto clandestino. También aseguró que no existe una criminalización sistemática contra las mujeres por abortar, ya que la mayoría de los encarcelados por estas causas son hombres.
En contraste, la mayoría calificada de legisladoras de Morena, PT y PVEM consideraron que la despenalización es apenas un primer paso. Subrayaron la necesidad de garantizar el acceso gratuito a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) mediante asignaciones presupuestales, así como el acompañamiento psicológico y medidas preventivas.
Desafíos pendientes
Aunque la reforma representa un avance significativo, aún queda por resolver la obligatoriedad estatal de brindar servicios gratuitos para la ILE. Esto plantea un desafío adicional para que este derecho sea plenamente accesible y no quede relegado al ámbito privado. La Suprema Corte de Justicia de la Nación analiza actualmente la obligación de los estados de adecuar sus normas en esta materia, lo que podría incidir en la implementación de la reforma en el Estado de México.