“Es como si yo eh… tomara en cuenta una opinión del FMI, o leyera un libro de Martín Moreno. ¡Safo! ¡Vámonos!”
LA VERSIÓN NO OFICIAL. Por Jesús López Segura
“Vámonoj a dejayunar”, dijo el Presidente López Obrador hacia el final de su conferencia de prensa esta mañana del 6 de diciembre de 2023, cuando tuvo que detenerse ante los gritos de los representantes de los medios presentes:
¡Los resultados de la prueba PISA!, le interpelaban con ansiedad muchos de quienes, con toda seguridad por su desempeño como reporteros, reprobarían ese misme examen y cualquiera otro que tratara de medir su capacidad como profesionales de la información.
López Obrador sonreía. Le daban la oportunidad de lanzar uno de esos dardos retóricos, habitualmente divorciados de la realidad, con los que suele salir al paso de los cuestionamientos sobre sus malos resultados, al menos comparados con las enormes expectativas que creó:
“Pues ya los vieron, este, nosotros no los tomamos en cuenta eh, porque pues todos esos parámetros se crearon en la época del neoliberalismo, del predomino del periodo neoliberal, en donde lo que querían era eh, impulsar supuestamente la calidad de la enseñanza, la excelencia, y desaparecer la educación pública, degradándola”.
¿En qué forma impulsar la excelencia en la calidad de la enseñanza “degrada la educación pública” en el tercer país peor evaluado de la OCDE en Matemáticas y Comprensión Lectora, además de ostentar el más bajo puntaje en Ciencia?
Ningún reportero se atrevió a formular ese cuestionamiento elemental que cualquier joven de secundaria de casi cualquier otro país de la OCDE habría formulado.
La SEP también hizo de las suyas para tratar de justificarse ante un auditorio que chapotea -por culpa precisamente de nuestro sistema educativo- en las aguas del analfabetismo funcional: Dijo la dependencia responsable de nuestro desastre que fue culpa de la pandemia, como si nuestro país hubiera sido el único que padeció esa tragedia.
Ante la falta de cuestionamientos sobre sus insólitas afirmaciones, don Andrés trató de desviar la atención y prosiguió:
“Nunca en la historia de México se había ofendido tanto a los maestros como en el periodo neoliberal. A nuestros maestros. ¡Nunca!”.
“Y esas pruebas son parte de lo mismo, es como si yo, eh, tomara en cuenta una opinión del Fondo Monetario Internacional, o una encuesta de… [GEA ISA, le ayuda un reportero] ándale, gracias por la ayuda. O un editorial del Reforma, ¿no?, o leyera yo un libro de Martín Moreno. ¡Safo! Vámonos”, concluyó rápidamente el mandatario ante las sonrisas aprobatorias de los comunicadores cortesanos, que sirven de extras en el show de La Mañanera, con Lord Molécula a la cabeza, quien por cierto aprovechó su status de “gran lambiscón” para buscar
el chayo del secretario de Seguridad Pública del Edomex.