La Mañanera, foro de propaganda política disfrazada de Conferencia de prensa

Es impresionante la forma en que el Presidente López Obrador usa la conferencia de prensa matutina como un instrumento de propaganda política extremadamente eficaz para sembrar en la mente de los fanáticos que le siguen la idea inamovible (él la llama “revolución de las conciencias“) de que solo existen en el país dos clases de políticos: los que pertenecen a la 4té y piensan como él y defienden sin chistar todo, absolutamente todo lo que él dice, y los conservadores hipócritas, corruptos, cínicos, ladrones, saqueadores (hoy agregó “cretinos”) que conforman la oposición, apoyados por medios igualmente conservadores, chayoteros, corruptos, Etc…

Cuestionado el presidente López Obrador esta mañana sobre Claudia Sheinbaum, que el INE le pide retirar la propaganda que despliega (o despliegan por ella) en todo el territorio nacional y sobre Marcelo Ebrard, que ya formó sus huestes de operadores políticos en todos los distritos electorales del país, el mandatario respondió textualmente:

Pues que el INE no se toca, dicen los conservadores. Es una superestructura de poder de facto, de hecho, porque de manera ehhh… evidente, notoria, pública, están violando la Constitución, el Artículo Quinto y Sexto de la Constitución General de la República, pero como son los intocables de la Mafia del Poder, los protegen, hasta hacen marchas los conservadores para proteger ese tipo de violaciones flagrantes a la Constitución.

Deben de leer el art 6 de la Constitución que había sido intocable hasta que llegó el más intocable de todos. Y ahora quieren que no se toque al intocable… Y da vergüenza que sean los medios de información al servicio de los conservadores los que apoyen esta decisión del INE que es contraria a la libertad de expresión. Por este artículo han luchado por siglos periodistas desde mediados del siglo XIX; Por este artículo se enfrentó Zarco y otros periodistas a Lerdo, a Porfirio Díaz. Lo llamaban la Ley Mordaza, pero ahora estamos en una situación especial. ¡Ahhh y no vayas a protestar porque te acusamos de dictador, de autoritario!
…

Yo le digo a la gente que no se preocupen. Hay que luchar para limpiar de corrupción… de parcialidad al INE. Hay que luchar por eso. Claro que sí se toca. Se debe de tocar. También que se sepa que la mayoría de la gente quiere la reforma al INE. Está demostrado en encuestas. Cuando se pregunta ¿Quieres que se eliminen los 200 plurinominales? 80% dice ¡Sí!

Esta minoría conservadora piensa que si tiene el control del INE va a poder hacer fraude. Por eso le digo a la gente: no se preocupen. Va a ser el pueblo el que elija y la mejor prueba somos nosotros. Yo llegué no por el INE sino por el pueblo. Nunca me acerqué a ellos porque sabía que eran árbitros vendidos. Hasta en los debates armaban todo para ver si me entrampaban. Y al final no pudieron, como no van a poder hacia adelante.

Ya se acabó lo del fraude y es que están obnubilados, no aceptan la realidad, para ellos el pueblo está equivocado. Lo que se está llevando a cabo no es adecuado. Ellos quisieran que el pueblo siguiera aplaudiendo la corrupción, el saqueo y desde luego los medios de información eran complemento, aparte -con honrosas excepciones- pues están en estas campañas de desprestigio de ataques. Los llamados intelectuales orgánicos que han perdido imaginación, talento, desde y luego dignidad.

Imagínense, lo vengo diciendo porque es muy ilustrativo. Hubo un tiempo, de dos tres décadas en que Pedro Ferriz era como López Dóriga, los grande gurús de las noticias y no informaban, sentenciaban, editorializaban. Ya lo dijo Pedro Ferriz. Cuantos radioescuchas, millones para ir a decir que yo hago mañaneras ¿Qué hicistessss el día 27 de noviembre a las 7 de la mañana? Hice mi ritual para que nos fuera bien en la marcha. Es de pena ajena pero el asunto no es de este señor ni de López Dóriga, ni Ciro o Carmen Aristegui, sino cuántos seguidores creyentes. Imagínense el daño provocado por la manipulación.

Estaba viendo una encuesta y siempre los indecisos eran mayoría. Ahora ya no hay indecisos, bajó, se cayó, ya todos tienen definición, nos hacía falta eso ha sido una etapa nueva. Ya no hay eso de que soy ciudadanos sin partido, pertenezco a la sociedad civil. Toda esa simulación se ha quedado atrás, estamos viviendo tiempos de definición. Qué bueno que podamos debatir porque son proyectos distintos y contrapuestos de nación:

Nosotros seguimos el ejemplo de Hidalgo. Ellos tienen como ejemplo a Iturbide. Nosotros a Juárez, ellos a Santana, a Porfirio Díaz. Nosotros a Madero, a Villa, a Zapata, al general Lázaro Cárdenas. Ellos tienen como antecedente haber apoyado a Huerta, haberse opuesto al reparto agrario, a la educación pública, a la expropiación petrolera. Ellos apoyaron a Salinas, la privatización de los bienes nacionales a particulares sobre todo extranjeros. No quieren al pueblo. Consideran que si hay pobres es porque el pueblo no trabaja, y que si hay pobres y ricos es por la suerte, la fortuna. Así es la vida, dicen.

¿Qué les recomendaría yo en vez de estar haciendo el ridículo? Que ya se definan

…. Se pueden ir a estudiar a Europa a EU y no cambia. A veces a mayor nivel académico, más racismo, clasismo.

DEMOS CRATOS… es el poder del pueblo distinto de la oligarquía que es el poder de los ricos.

Ellos quieren CRATOS sin DEMO… Este es el fondo de todo por eso las actitudes de racismo y clasismo. Y son acarreados porque cuándo van a imaginar que una gente del pueblo va a tener un nivel de politización mayor que el de ellos. Estoy seguro que en muchos casos la trabajadora doméstica tiene más politización que los dueños de la casa, nada más que se quedan calladas. No dicen nada. Y más con lo que ve en su entorno, el despotismo, el mal trato, el racismo, el clasismo, la falsedad, la hipocresía, el individualismo con el que se conducen, sin tenerle respeto a las personas, afectando la dignidad de la gente. Es importante lo que se está viviendo ahora…. Están completamente cerrados. Y esto pasa en todo el mundo: hay sectores progresistas y hay sectores retrógradas, conservadores.

Son unos cretinos y además cínicos. Mienten como respiran. Lorenzo Córdova tiene doctorados y ya demostró que es un racista…

Este esquema que se repite todos los santos días un promedio de 3 horas por jornada, e incluso el mandatario ha pensado en extender a sábados y domingos (y no dudo que lo haga conforme se aproxime el proceso de sucesión presidencial) está diseñado como una estrategia claramente goebbeliana (que él mismo denuncia y critica, como para curarse en salud, porque dice que los escritores no deben repetirse pero los políticos que luchan por crear conciencia en las masas, sí) da por resultado que sus seguidores (entre los que me cuento por cierto) no se atrevan a criticarlo, so pena de ser expulsados violentamente al otro cajón, el de los conservadores hipócritas.

Eso es justamente lo que está sucediendo con Ricardo Monreal, quien ya este fin de semana se colocó la soga al cuello al afirmar nuevamente que su límite es la dignidad y que los malos tratos a los que ha sido sometido en Morena podrían llevarlo a anunciar que siempre sí “diciembre le gustó p’a que se vaya”, y que podría irse a la oposición, es decir a la coalición de conservadores tales por cuales.

Solo que, al mismo tiempo, Santiago Creel le puso un estate quieto: le aclaró que sería bien recibido en las filas pero no como candidato presidencial, porque hay varios aspirantes que no vienen de la acera de enfrente, solo porque allá no los pelaron.

Así que don Ricardo, habiendo tenido, desde el control del Senado de la República, la gran oportunidad histórica de servir de contrapeso a las ocurrencias del Ejecutivo -con todo respeto y lo que usted quiera-, terminó confrontándose finalmente con él, pero no por defender los principios de la 4té de los que don Andrés se ha alejado en la práctica de su gobierno, como el dedazo descarado y la militarización no solo en la Seguridad Pública (con sus pésimos resultados), sino en todos los ámbitos de la vida nacional, lo que le hubiera valido a Monreal la simpatía y aceptación de muchísimos que habiendo votado por un cambio estamos frustrados por esta polarización absurda en donde todo se ve blanco o negro, sin matices que permitan ir mejorando la vida nacional.

Don Ricardo aparece ahora como un despechado porque no se le incluyó en la lista de las corcholatas, es decir, del dedazo, como le prometieron si bregaba en favor de las 3 grandes reformas del obradorismo (la Eléctrica, la de la Guardia Nacional y la Electoral) y se muestra abiertamente dispuesto a pasarse con el enemigo, lo que la fanaticada no le perdona a Lilly Téllez, por ejemplo, cuando muy bien podría haber aprovechado su importante posición para enmendarle la plana a un Presidente que ha perdido la brújula por completo y en vez de gobernar se la pasa usando su cargo para hacer proselitismo escandalosamente ilegal en favor del movimiento que lo llevó al poder.

Monreal será olvidado por la gente porque fue incapaz de encabezar una tercera vía que desechara a los corruptos del pasado -en congruencia con los postulados fundamentales de la 4té- pero sin encajonar maniqueamente a los mexicanos en “buenos y malos”, exigiendo congruencia entre los dichos y los hechos de un hombre que se cree perfecto al considerar que solo existen dos tipos de personas: los que están con él, o en su contra.

Yo estoy con él en muchos de sus ideales, como por ejemplo el hecho de que el principal problema de México ha sido la corrupción. De que hay que acabar con la violencia atacando las causas. Pero no estoy de acuerdo con sus métodos para alcanzar esos objetivos. El Presidente López Obrador debería tener la honestidad intelectual de reconocer que sus estrategias en esos dos rubros fundamentales (un fiscal corrupto y una militarización frenética) han fallado por completo.

Así que Claudia, que se limita a repetir como muñequita de ventrílocuo todo lo que dice el mandatario; Adán, que prácticamente es un clon de López Obrador, aunque con tintes claramente autoritarios; y Monreal que en vez de aprovechar su amistad con Dante Delgado se hubiera decidido por la tercera vía -perfectamente legítima-, termina alejándose del morenismo por las malas causas (su increíble egocentrismo y ambición personal), no parecen ser la solución que corrija el rumbo del país.

Vamos a ver si Marcelo, que se ha desempeñado muy bien en su campo de la Política Exterior -con los altibajos de esa extraña manía del Presidente de hacerse amigo de Donald Trump y de creerse un líder internacional de la izquierda- logra poner finalmente los puntos sobre la íes de lo que debería ser una verdadera transformación nacional, más allá de discursos repetidos hasta la náusea que se contradicen flagrantemente con las prácticas de Gobierno.