AMLO: “Hay que atajar la propaganda negra, el amarillismo”. Por Jesús López Segura

Ante la asonada terrorista de grupos criminales y de la sociedad, AMLO culpa, como siempre, a sus “opositores”

LA VERSIÓN NO OFICIAL

Ante la asonada -con francos tintes de incipiente terrorismo– de los últimos días, el Presidente López Obrador se fue por la fácil de costumbre: culpar a otros, a los neoliberales opositores, de ser los causantes malignos -para desestabilizar a su gobierno- de la quema de tiendas Oxxo, de camiones, vehículos particulares y de otros establecimientos comerciales.

En vez de admitir que los criminales organizados están muy molestos con los intentos de captura y extradición de algunos líderes importantes de la poderosa mafia criminal mexicana, porque tales acciones contradicen su promesa de “abrazar a los delincuentes, porque también son seres humanos”, el mandatario arenga de nueva cuenta a sus numerosos seguidores con un discurso tendiente a polarizar aún más a un país prácticamente al borde de una guerra civil:

“Hay que atajar la propaganda negra, el amarillismo. ¿Por qué no pones las gráficas sobre los homicidios en México. Para que se sepa. Porque hay amnesia. Hacen como que se les olvidan las cosas. Estamos bajando en todos los delitos…”

“Una prensa de lo más asquerosa [se refiere a la que atacó a Madero, con quien se compara casi a diario]. Periodistas e intelectuales rastreros que fueron creando el ambiente para que se diera el cuartelazo, jugaron un papel decisivo la prensa y los intelectuales del antiguo régimen. Pero entonces no había la conciencia democrática porque Madero se adelantó a su tiempo, porque Madero es uno de los mejores políticos del mundo. No existían las redes sociales y para llevar a cabo una transformación se requiere del apoyo del pueblo. Nada de titubeos y medias tintas. Primero los pobres”.

“Por eso pueden hacer propaganda pero la gente del pueblo no va a apoyar estos actos vandálicos. Noooo. La gente ya está muy consciente. Además no a la violencia. No se puede enfrentar la violencia con la violencia. Ese no es el camino.”

“Y también a los conservadores corruptos que ojalá y actúen de manera más responsable y que compitan, participen, debatan, en buena lid. Que actúen con imaginación, con talento, no de manera burda. Que sean responsables”.

“Cada vez que hacen algo les sale mal. Se desnudan. Es como la fábula del rey va desnudo. Ojalá y hagan seminarios, hagan un análisis de cómo está la situación económica, política: Los errores que nosotros cometemos y cómo van a hacer sus propuestas para que la gente vea que estábamos mejor antes. Pero que busquen la manera de hacerlo sin dañar o sin esa, ehhh… saña de querer que haya violencia. Que haya inflación. Que no se hagan las obras. Que nos vaya mal aunque le vaya mal a México. Que hagan a un lado todo eso. Porque si no, van a seguir perdiendo. No se puede tener autoridad política sin autoridad moral…”

Pero hay que advertir que no solo los grupos criminales están organizando, desde la semana pasada, actos incipientes de terrorismo que puede crecer, sino también grupos sociales hartos de la ineficacia desesperante del presente gobierno federal, los estatales y municipales, para frenar la extorsión, el secuestro y los homicidios, como ocurrió ayer, cuando cientos de personas enardecidas quemaron la casa de Ana María Vázquez Carmona, la alcaldesa panista de San José del Rincón, municipio mayoritariamente mazahua, justo a unas horas de la visita de la candidata del oficialismo priista, Alejandra del Moral, disfrazada precisamente de indígena mazahua, a la zona aledaña de San Felipe del Progreso, con la misma predominancia étnica.

Enardecimiento narco el de las últimas horas, pero también social.