Alienta Mario Delgado conflicto artificial en el morenismo mexiquense
La única duda es si lo hace por indicación de López Obrador o por sus purititas pistolas
LA VERSIÓN NO OFICIAL. Por Jesús López Segura
De que está creciendo el conflicto del grupo mayoritario de Morena en el Estado de México, encabezado por el senador Higinio Martínez y por el diputado Maurilio Hernández, con una serie de grupúsculos que ven la oportunidad de sacar raja política de esta confrontación irracional y artificialmente alentada por Mario Delgado, al posponer en dos ocasiones los procesos locales de Morena para dar rienda suelta al canibalismo y la pepena, no hay ya la menor duda.
El hecho de que el propio Maurilio Hernández, presidente del Consejo Político de Morena en la entidad y líder de los diputados locales, junto con la diputada Azucena Cisneros, una de las que se daban por amarradas en la presidencia del partido, luego de la abrumadora mayoría alcanzada por el GAP y Mexiquenses de Corazón, reclamen abiertamente y emplacen al dirigente nacional a que deje de aplazar el proceso, habla ya de una ruptura del diálogo ante la incomprensible actitud autoritaria de Delgado que favorece a la oposición y alienta el oportunismo de quienes ven burro y se les ofrece el viaje.
Dice la columna El Caballito de El Universal (Fracturas en Morena en el Edomex), seguramente por encargo, “que la maestra Delfina Gómez no quiere en la dirigencia estatal de Morena a nadie del Grupo Acción Política (GAP), que encabeza el senador Higinio Martínez“.
“Por eso, nos comentan, se ha aplazado en dos ocasiones el Consejo Estatal, en el que las huestes de don Higinio son las que tienen la mayoría… Hay versiones entre los morenistas mexiquenses de que desde la dirigencia nacional se quiere evitar la celebración de ese consejo, para designar de manera directa al que conducirá los destinos de ese instituto político. En esta semana se sabrá quién gana la pulsada política, pero al parecer, tras la contienda por la candidatura, en la que la maestra Gómez se impuso al senador Martínez, la relación entre ambos no quedó tan bien, como se ha hecho creer”.
El Universal.- https://www.eluniversal.com.mx/metropoli/fracturas-en-morena-en-el-edomex
Roberto Rock, otro de los columnistas de El Universal muy interesado en el proceso mexiquense, apunta en su columna (La encrucijada de Ricardo Monreal), que el senador zacatecano “tendrá en su mano definir, entre hoy y mañana, quién ocupará la presidencia de la cámara baja a partir del jueves”, y que uno de los perfilados “es el mexiquense Higinio Martínez, incondicional político durante casi 30 años de López Obrador… Si Monreal se inclina por él, ello supondría un mensaje más conciliador hacia Palacio. Por añadidura, se dotaría al senador Martínez de una importante plataforma en las negociaciones paralelas con el equipo de la maestra Delfina“.
El Universal.- https://www.eluniversal.com.mx/opinion/roberto-rock-l/la-encrucijada-de-ricardo-monreal
Independientemente de si el senador Higinio Martínez es reconocido con un nombramiento relevante en el Senado, como “premio de consolación” dicen otros columnistas, por haber mantenido una actitud institucional ante el dedazo disfrazado de “encuesta” que favoreció a Delfina Gómez, ese nombramiento podría significarse como “el beso del diablo” por parte de Monreal -si es que él, como presume Rock, es el que toma la decisión-, o podría convertirlo en un magnífico impulsor de la maestra en la nada fácil contienda electoral que se avecina en el último bastión importante del priismo nacional, si el nombramiento en el Senado está pactado con el Presidente, como una forma de reconocimiento.
No tendremos que esperar mucho para saber si, como dicen los amarra navajas de las tribus minoritarias del morenismo mexiquense, la orden de marginar al grupo más importante de la izquierda local proviene, incomprensiblemente, de Palacio Nacional, con el visto (nada) bueno de la maestra Delfina, o es una de las tantas forma autoritarias que desbordan a un dirigente como Mario Delgado que parece trabajar para la oposición cuando señala de “traidor” a cualquiera de sus correligionarios que discrepe de sus malos hábitos antidemocráticos.
La encrucijada en todo caso implica la posibilidad de una ruptura, evitada hasta el límite de la dignidad por el líder indiscutible de la izquierda mexiquense, que podría poner en serios predicamentos el designio presidencial de imponer, a rajatabla, sus caprichos. Ya veremos.
