¿Ya echó a perder AMLO a García Harfuch? LA VERSIÓN NO OFICIAL. Por Jesús López Segura
Una hora le tomó al tabasqueño convencer al consentido de Claudia de abrazar a los delincuentes
Jura el todavía Presidente Andrés Manuel López, que la Ciudad de México es una de las más seguras del mundo, y que tal condición alcanzó su mayor gloria en el periodo de gobierno de la Presidenta electa, Claudia Sheinbaum, con Omar García Harfuch como secretario de Seguridad. Es la primera vez, que yo recuerde, que don Andrés elogia al discípulo de García Luna y heredero de los otros dos García, Paniagua y Barragán.
Ayer se reunió con él, por cierto, y de seguro que don Omar debe haberle dado alguna garantía de que honrará la política de los abrazos a los criminales pues de lo contrario, no se habría dado ese elogio madrugador.
Si el tabasqueño fuera sincero, es decir, si realmente reconociera los escandalosos índices de homicidios dolosos durante su administración, por ejemplo, no trataría de imponerle al consentido de doña Claudia la continuidad de su desastrosa manía de abrazar a los delincuentes, puesto que si es verdad que la Ciudad de México es tan segura como dice, se limitaría a respetar la decisión de su sucesora de poner a Harfuch al frente de quizá la más delicada tarea de su próximo gobierno. Punto.
No andaría AMLO de metiche, para usar una expresión suya muy socorrida, metiendo su cuchara en el plato de su sucesora, o como dicen en la serie Prison Brake, “el hocico en otros bebederos”.
Y sí, de acuerdo con fuentes consultadas por EL UNIVERSAL, la visita de García Harfuch al Presidente duró poco más de una hora “y fue para dialogar sobre la política de Seguridad que se ha aplicado en este sexenio y la que se tiene pensada para la siguiente administración”.
Así o más claro el injerencismo compulsivo del aspirante a dictador, obsesionado en colocar sus pulgas en petates ajenos, con el ridículo argumento del presunto “éxito” de su gestión en la materia, cuando arrastrará el vergonzoso récord de 200 mil asesinatos dolosos, 4 veces más que los norteamericanos muertos en la Guerra de Vietnam y 5 veces más que los cerca de 40 000 palestinos muertos en la ofensiva militar israelí en Gaza desde el 7 de octubre.
Pero don Andrés y sus huestes de alienados aseguran que “atacando las causas” sus resultados son espléndidos, cuando la realidad apunta a un crecimiento sostenido de asesinatos dolosos desde que los gobiernos mexicanos empezaron a usar a la milicia (marinos y soldados) en tareas de “Seguridad”, es decir, desde el mandato de Felipe Calderón, pues con Fox hubo 60 mil muertos que se duplicaron (120 mil ) con Calderón y crecieron a 150 mil con Peña y a 200 mil con AMLO, de quien, se sospecha, podría estar encubriendo unos 50 mil asesinatos adicionales con la pícara estrategia de colocarlos en el casillero de “desaparecidos”.
Los números no mienten y en cualquier país civilizado, que no tuviera millones de analfabetas funcionales ansiosos de que se les “haga justicia” con pensiones muy limitadas, ya estaríamos al borde de una guerra civil, provocada por el intento golpista de pintar de verde olivo de manera permanente las tareas de Seguridad, desaparecer las plurinominales y al Poder Judicial, pero sobre todo por el proyecto de continuar con una política simple y llanamente genocida, a partir de la incomprensible manía de apapachar a la delincuencia organizada. ¿No cree usted?