El emblemático objeto simboliza un tributo a su defensa de la libertad de expresión

Toluca, Méx; 2 de marzo de 2025. En reconocimiento a sus aportaciones en el ámbito jurídico, político y periodístico, la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) resguarda la máscara mortuoria de Ignacio Ramírez Calzada en el Museo de Historia Universitaria “José María Morelos y Pavón”. Este homenaje no solo preserva su memoria, sino que también fortalece la identidad universitaria al recordar su impacto en la historia del Instituto Científico y Literario (ICL), antecesor de la UAEMéx.

Las máscaras mortuorias, moldeadas directamente sobre el rostro del fallecido, capturan con precisión sus rasgos, inmortalizando un instante de su existencia. En el caso de Ramírez Calzada, su máscara fue elaborada en 1879 por el pintor y escultor Primitivo Miranda como tributo a su papel fundamental en la defensa de la libertad de expresión en México.

Bajo el seudónimo de “El Nigromante”, Ignacio Ramírez Calzada firmó artículos en el periódico Themis y Deucalión, donde manifestó su apoyo inquebrantable a las Leyes de Reforma, convirtiéndose en una figura polémica y enfrentando un juicio por delitos de imprenta e incitación a la rebelión. Su influencia no se limitó al ámbito periodístico, pues como profesor del ICL promovió la Ley Benéfica, permitiendo el ingreso de estudiantes indígenas a la institución. Entre los beneficiados destacó Ignacio Manuel Altamirano, quien más tarde escribiría una biografía sobre su maestro.

La máscara mortuoria original de Ramírez Calzada fue donada a la UAEMéx por su bisnieto, José Emilio Arellano Mendoza, según lo documentado por el cronista Julián Salazar Medina. Desde 2015, forma parte del acervo del Museo de Historia Universitaria, donde incluso protagonizó la exposición “La pieza del mes”. Una copia en acrílico se exhibe en el Auditorio “Ignacio Ramírez Calzada” de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, asegurando que su legado continúe presente en la comunidad universitaria.