Responde AMLO con injurias a reportera de Univision
Lo había cuestionado por hacer público el teléfono de la reportera del New York Times
Jesica Zermeño de Univisión, dice que para poder entrar a la conferencia, le dieron la lista de lineamientos.
Señala que en el punto cinco, se indica que todas las personas deberán respetar lo señalado en la Ley de Protección de Datos Personales en posesión de sujetos obligados.
– “Pero el día de ayer, usted, presidente, al presentar esta carta que le envía la Jefa de la Corresponsalía del NYT para este reportaje, que ya desglosó ayer, usted da a conocer su número telefónico, en un país, presidente en donde ya han fallecido 43 periodistas, comunicadores asesinados y que el Comité de Protección a Periodistas considera pues el país más preocupante, donde hay más preocupación del Hemisferio Occidental para ejercer este oficio.
Mi pregunta presidente es ¿por qué lo hizo?
-Bueno, primero, ustedes, con todo respeto, quienes hacen un periodismo, diría eh… faccioso, porque nada más eh… se inclinan en favor de grupos de intereses creados, no hacen un periodismo para todos, están demasiado cercanos al poder económico y al poder político: Univision, El Niu Yor Taim, el Washinton pos, Financial Taim, Washinton Yurnal; aquí el Reforma, que es preferido del periodismo conservador o el más mh… importante vocero del bloque conservador.
A ustedes este… con todo respeto, les da mucho por ver eh… la viga eh… o la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio. Ustedes eh… se sienten eh… bordados a mano, como una casta divina, privilegiada. Ustedes pueden calumniar impunemente como lo han hecho con nosotros, como se hizo ayer, como lo dimos a conocer ayer. Y no los puede uno tocar ni con el pétalo de una rosa.
-El teléfono, el teléfono que dio a conocer es personal.
– Sí, sí, sí. ¿Y qué pasa cuando esta periodista me está calumniando? Me está acusando.
-Sí, pero hay una ley que impide eso en este país presidente.
-Cómo no, cómo no, pero también la calumnia. Me está vinculando a mí, a mi familia con el narcotráfico, sin pruebas.
-Pero el teléfono personal. Hay una ley que impide que usted dé a conocer este teléfono.
-Sí, sí, pero antes de eso, por eso hablo de la paja en el ojo ajeno y no la viga en el propio, porque ustedes, Univisión, Jorge Ramos, de inmediato, este… cuestionario eso, pero no son capaces de una autocrítica para revisar el tipo de periodismo, si es que se puede llamar periodismo a lo que hacen.
-Pero más allá de la investigación, entonces, usted no cree que fue un error?
-No, no, porque este es un espacio público y nosotros estamos aquí este, aplicando un principio de la transparencia…
-Pero eso la pone en riesgo a ella. Más allá de usted cualquiera le puede llamar y cualquiera la puede amenazar y le puede decir algo señor, porque…
-No, no pasa nada. No pasa absolutamente nada.
-Sí pasa, en este país, que tiene 43 muertos.
-No, no, no. Es que también ese es otro dato. Ustedes son, ¿sí? los más tenaces eh… informadores, o mejor dicho desinformadores, los más tenaces eh… manipuladores.
Esto que dice, esto que dice de que hay un gran riesgo para los periodistas ¿sí? es una asociación vinculada a grupos de intereses creados, a gobiernos hegemónicos.
Claro que lamentablemente hay compañeras y compañeros que han perdido la vida, pero no hay impunidad. El Estado en México no es violador de derechos humanos como sucedía antes ¿eh? cuando ustedes callaban.
-Pero le dio el teléfono no solamente a los miembros de su gobierno, que podríamos pensar que ellos tienen el respeto a los medios de comunicación, se lo dio el teléfono a todo el mundo y cualquiera la puede atacar.
– Sí, es que aquí, es que aquí este… la vida pública es cada vez más pública.
-Entonces usted no ve ningún error?
-No, no, para nada.
– Volvería a presentar un teléfono privado de uno de nosotros?
– ¡Claro! Cuando se trata de un asunto en donde está de por medio la dignidad ¿sí? del presidente de México.
– ¿Y qué hacemos con la ley de transparencia señor presidente?
-No, por encima de esa ley ¿sí? está la autoridad moral y la autoridad política. Y yo represento a un país, represento a un pueblo que merece respeto, que no va a venir cualquiera ¿sí? porque nosotros no somos delincuentes, tenemos autoridad moral, no va a venir cualquier gente, que porque es el Niu Yor Taim y nos va a poner, nos va a sentar en el banquillo de los acusados.
Eso era antes, cuando las autoridades en México eh… permitían que los chantajearan. Ahora no, ahora nos tienen que respetar, porque somos autoridad legal, legítimamente constituida, surgida de un movimiento democrático y en México hay libertades, que no las hay en Estados Unidos ¿eh? si por eso dije ayer, porque ahí está el caso de Assange, ¿Qué han dicho ustedes?
-Sé su historia, señor presidente.
– ¡Nada! Entonces decía yo que si condenan a Assange, que obtuvo información que precisamente difundió el Niu Yor Taim, estamos hablando de supuesta información de Estado y Seguridad Nacional, pues resulta que al Niu Yor Taim que difunde esa información no lo juzgan y solamente juzgan a Assange, por eso este… si continúan de esa manera…
-Va a revelar nuestros teléfonos…
-Sí, no, estoy planteando que mejor devuelvan la Estatua de la Libertad a Francia o que este, nos las manden acá a México, porque aquí sí hay libertades.
-Hablando de eso señor presidente, en este momento que yo estoy hablando con usted, afuera hay cuatro colegas de nosotros, entre ellos Stephanie Palacios de la agencia Sputnik. El día de ayer precisamente, le preguntó sobre esta filtración de datos personales de varios colegas aquí de la fuente presidencial…
-Estamos tratando.
-Dicen que ya hizo muchas preguntas, que no la dejaron entrar en este momento, que está vetada. A mí me parece una, una…
-No aquí no vetamos a nadie.
-Podría decirnos, pero podrían estar aquí sentados, yo entiendo. Porque además ustedes han hecho un mecanismo muy, me parece, eficiente para que todos los colegas podamos tomar, y estar aquí sentados y hacer una pregunta. Pero ellos no pueden entrar ni siquiera, ni siquiera a este salón presidente. ¿Por qué?
– No, no, no. Este… ¿hay censura aquí? -pregunta López Obrador a los periodistas ahí reunidos y responden: No.
-Pero están en sala de prensa, a mí me dicen que no los dejan entrar
-N, pero aquí están ellos.
– Pero el reglamento habla de la tercera fila. Si tú preguntas, yo entiendo, a partir de la tercera fila te podrías sentar. Es mi pregunta.
– No. Pero sabes qué, no conozco bien el reglamento. Sí, porque este… aquí nada más lo que sabemos es que no hay censura para nadie…