Demandó la preservación de la libertad de expresión y prensa, y la solidaridad con los periodistas agredidos

La Internacional Socialista lanzó una grave advertencia sobre la infiltración del crimen organizado en la política mexicana, señalando un riesgo para la integridad del proceso electoral programado para el 2 de junio. Pedro Sánchez, líder de la organización, denunció la persecución sistemática que enfrentan la oposición y los órganos electorales en México, destacando la importancia de preservar la libertad de expresión y de prensa en el país y expresando solidaridad con los periodistas agredidos.

El pronunciamiento resaltó que México ha sido testigo de más de 180,000 asesinatos violentos desde 2018, lo que refleja un creciente control por parte de entidades criminales.

Sin aludir a este pronunciamiento del organismo más representativo de la izquierda internacional, el Presidente López Obrador (que se considera él mismo “de izquierda”) dijo en La Mañanera que “hay un periodista salinista que se amparó para que yo no hable de él…” con referencia a Raymundo Riva Palacio.

“¡Quieren eliminar mi derecho de réplica!”, exclamó el presidente mexicano luego de reírse abiertamente de la protección judicial solicitada por el periodista. Pero en realidad lo que el mandatario hace no es ejercer el “derecho de réplica”, el cual implicaría que en el mismo espacio en el que algunos periodistas critican su actuación, él tuviera el cuidado de refutarlos con datos precisos que pongan en evidencia la falsedad o la inexactitud de sus aseveraciones.

Pero lo que hace el mandatario mexicano -y por lo visto esto ya ha trascendido nuestras fronteras-, es insultar con adjetivos muy hirientes, como los de “racistas” y “fachos”, a todos aquéllos que, incluso con argumentos bien justificados, se atrevan a criticarlo. A esa agresión desde el poder es a lo que el Presidente de México llama “derecho de réplica”.

Como parte de su misión de fortalecer los valores democráticos, la Internacional Socialista instó a sus partidos miembros a movilizarse para una misión de observación electoral en México y solicitó la protección del proceso electoral. Además, hizo un llamado para garantizar el equilibrio y la independencia de los poderes Legislativo y Judicial, en medio de los ataques dirigidos a legisladores y ministros por parte del Ejecutivo mexicano.

La Declaración sobre las elecciones en nuestro país, aprobada en España, concluyó que el crimen organizado representa una amenaza significativa para la integridad del proceso electoral. La resolución, aprobada por el consejo de la Internacional Socialista en la sede del Partido Socialista Obrero Español en Madrid, instó a observadores internacionales y aliados democráticos a monitorear de cerca la situación y respaldar los esfuerzos para combatir la influencia del crimen organizado.

Pedro Sánchez, junto con la organización mundial de partidos socialdemócratas, enfatizó la necesidad de abordar el nexo entre el crimen organizado, la violencia política y la erosión institucional para salvaguardar el futuro democrático de México. Se destacó la importancia de contrarrestar las amenazas del crimen organizado y preservar las aspiraciones democráticas del país.

Finalmente, se subrayó la importancia de las elecciones del 2 de junio en México, donde 98 millones de ciudadanos emitirán votos para más de 20,000 cargos, incluyendo el de Presidente de la República.