martes, diciembre 3

Cuando lo que está en juego es la vida, don Andrés. LA VERSIÓN NO OFICIAL. Por Jesús López Segura

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“Temo por mi vida” le dijo a AMLO la periodista Lourdes Maldonado … ¡Y la mataron!

¿Qué tiene que pasar para que de una vez por todas cesen los asesinatos de periodistas en el país?, le preguntan al Presidente mexicano en su Mañanera. Él da una serie de respuestas, bastante convincentes al principio, en el sentido de que Lourdes Maldonado pidió ayuda en un tema laboral y se le prestó, tan es así que ganó el juicio contra Jaime Bonilla, argumenta el mandatario; hablaba sistemáticamente a Palacio Nacional y se le atendía, explica. Se investigará el caso como todos los casos de asesinatos de periodistas… concluye.

Pero aquí es donde don Andrés, con todo respeto, empieza a desbarrar.

¿Por qué?

Según Reporteros Sin Fronteras (RSF), citados en el portal Alianza de Medios, la impunidad que gozan los asesinos de periodistas en México “es casi total: entre el 95 y el 99 % de los asesinatos de periodistas, el autor intelectual queda impune y ninguno de los casos de periodistas desaparecidos de los últimos años se ha resuelto”.

¿Entonces don Andrés Manuel?

¿Qué podemos esperar de una investigación como la que anuncia como para salir del paso en su conferencia de prensa cuando todos sabemos que en unos días se habrá olvidado el asunto, o más bien, se habrá eclipsado con otro crimen probablemente más escandaloso?

No soy un opositor de su Gobierno, “un conservador” como califica usted a cualquiera que lo critique. No soy su adversario ni mucho menos su enemigo. Soy un analista de bien que desearía que todas sus promesas de que acabaría con la inseguridad porque usted sí iba a atacar las causas, se cumplieran. Que en verdad ya no existiera la impunidad ni la corrupción como predica a diario dese el púlpito de su conferencia de prensa.

La paz y tranquilidad son fruto de la justicia ha repetido usted infinidad de veces, pero no hemos visto que se ajusticie a nadie de los que describe usted a diario como los monstruos que hipotecaron al país: 120 millones de hectáreas concesionadas a mineras rapaces. 15% de descuento les sacó usted a los estafadores de los penales que nos cuestan 18 mil millones de pesos al año. El Fobaproa sigue desangrándonos y usted, teniendo un poder casi absoluto, se limita a quejarse. ¿No se ha dado cuenta de que le llegó la hora de ejercerlo?

Sigue actuando, don Andrés, como opositor. Su estilo plañidero de lamentar lo que nos hicieron los neoliberales solo produce indignación a quienes esperaríamos acciones concretas para remediar el desastre que, efectivamente, le heredaron. Está usted llegando al límite del gatopardismo. Su coordinador de Comunicación Social fue encargado públicamente de apoyar a Lourdes Maldonado. Ganó su disputa laboral. La inscribieron en el mecanismo de protección de periodistas. Sí. Pero la mataron y alguien debe asumir la responsabilidad. No hay vuelta de hoja, don Andrés.

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