El conservadurismo de AMLO en materia de drogas, veneno para la cumbre de Cali, Colombia
Contrasta con la actitud progresista de Petro, partidario de cambiar el paradigma prohibicionista
La Conferencia Latinoamericana y del Caribe sobre Drogas, que comenzó en Cali, Colombia, se centra en las políticas de drogas y cuenta con la presencia de dos destacados líderes de la región: el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), y el presidente de Colombia, Gustavo Petro.
AMLO, conocido por su enfoque conservador en relación con las drogas, y Petro, un defensor del liberalismo en esta materia, han generado expectativas sobre la dirección que tomará la conferencia. Mientras Petro cuestiona la “irracional guerra contra las drogas” y aboga por la despenalización gradual, AMLO ha mantenido una postura de prohibición.
Adriana Muro, directora de la ONG Elementa DDHH, señala la decepción con la política de drogas de AMLO, quien prometió un enfoque de salud pública pero, en la práctica, ha continuado con políticas similares a sus predecesores, incluso fortaleciendo el papel del Ejército en seguridad pública.
Por otro lado, Petro ha abogado ante la ONU por la despenalización de la hoja de coca y el uso recreativo del cannabis. Para él, la superación del prohibicionismo es una prioridad, mientras que AMLO mantiene un enfoque conservador.
A pesar de la conferencia, los expertos son escépticos acerca de que América Latina alcance un consenso unificado contra el prohibicionismo. La ausencia de otros presidentes progresistas en la conferencia, como Luis Arce de Bolivia y Gabriel Boric de Chile, agrava las dudas sobre un cambio significativo en la política de drogas de la región.
En resumen, la Conferencia Latinoamericana sobre Drogas en Colombia destaca las diferencias entre AMLO y Petro en cuanto a las políticas de drogas, generando incertidumbre sobre la posibilidad de un cambio significativo en la región hacia enfoques de salud pública y derechos humanos.